Las horas más bajas del artefacto político Unidas Podemos por Pablo Elorduy
El 9 de mayo de 2016, con una estudiada puesta en escena, Alberto Garzón y Pablo Iglesias anunciaban la confluencia de Izquierda Unida y Podemos de cara a las elecciones que se iban a celebrar el 26 de junio. El anuncio, a través de las redes sociales, se fraguaba después en la sala Mirador, conocido teatro del barrio madrileño de Lavapiés. En el plazo de tres años y medio se iba a consolidar con la entrada por primera vez en la historia de tres organizaciones “a la izquierda del PSOE” en el Consejo de Ministros. IU, Podemos y el Partido Comunista de España pasan por una grave crisis, seis años después del llamado Pacto de los Botellines.
El detonante ha sido la negociación agónica de la lista electoral de la confluencia de cara a las elecciones del próximo 19 de junio en Andalucía. Un error informático derivado de la tarde de estrés en torno a esa negociación ha abierto una crisis que pareció cerrarse por unos instantes cuando se confirmó que el proyecto de Ione
Belarra se sumaba a IU, Más País, PCE, Equo y Alianza Verde.